En Agbar, nos comprometemos, a través de nuestra acción, día tras día, con la preservación del medio ambiente y los recursos naturales, fundamentales para el futuro de las personas y de nuestro planeta
Este año Naciones Unidas pone el foco del Día Mundial del Agua en el lema “Hacer visible lo invisible”, con el fin de destacar la importancia del agua subterránea, un recurso hídrico que, aunque no visible, es fundamental para el planeta y las personas.
Este año, Naciones Unidas pone el foco del Día Mundial del Medio Ambiente, que se celebra el 5 de junio, en el lema “Una sola Tierra”, destacando la necesidad de vivir de forma sostenible, en armonía con la naturaleza.
Este lema fue el eslogan de la primera Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Humano en 1972 y, 50 años después, sigue vigente: el planeta es nuestro único hogar y es responsabilidad de todos −administraciones, empresas, entidades sociales y ciudadanía− cuidarla y salvaguardar sus recursos finitos.
El cambio climático, causado por la actividad humana y cuyas consecuencias se han intensificado estos últimos años, está afectando a los recursos naturales y hídricos, está agravando la pérdida de biodiversidad, y, de manera global, está impactando la calidad de vida de las poblaciones.
Por todo ello, es necesario implementar con urgencia cambios transformadores para encaminarnos hacia un futuro más sostenible, mediante proyectos responsables con el planeta y que doten de una mayor resiliencia a las ciudades y también a los entornos rurales.
Nuestro Compromiso
En Agbar, mediante las alianzas y la innovación, nos comprometemos, día tras día, a preservar el medio ambiente y los recursos naturales. Actuamos para acelerar la transformación ecológica y contribuir así a un futuro más sostenible para las personas y el planeta.
En concreto, entre las soluciones encaminadas a luchar contra el cambio climático y a preservar el medio ambiente, hemos desarrollado una estrategia climática basada en 4 ejes.
4 Ejes
1. Mitigación de los efectos del cambio climático
mediante la compra de energía verde, la generación de energías renovables o el impulso de la movilidad sostenible.
2. Adaptación a las consecuencias del cambio climático
mediante el desarrollo de planes de resiliencia para hacer frente a los efectos del cambio climático sobre los recursos hídricos, impulsando la preservación de ecosistemas clave.
3. Modelos de economía circular con soluciones de residuo cero
Entre ellos, destaca el modelo de transformación de las depuradoras tradicionales en biofactorías, con la aplicación de 3 criterios: reutilización del agua para nuevos usos (riego agrícola, industrial, etc.), valorización de los recursos (por ejemplo, generación de biogás a partir de los lodos, etc.), producción de energía para el abastecimiento, con impacto positivo sobre el entorno.
4. Modelos responsables con el clima
potenciando infraestructuras verdes y una economía baja en carbono. En este eje de actuación, destacan las soluciones basadas en la naturaleza, tanto en ámbito urbano como en espacios de interés natural.
Proyectos destacados
Barcelona: recarga de los acuíferos en la zona del río Llobregat
Biofactoría Sur de Granada
La biofactoría Sur de Granada, gestionada por Emasagra, se ha convertido en un caso de éxito y referente de economía circular a escala internacional, ya que ha conseguido que prácticamente el 100% del agua depurada se reutilice para el riego de cultivos leñosos; casi la totalidad de los lodos arenas y grasas se valoricen como abono en agricultura o jardinería, y se consigue un balance energético positivo, generando más energía renovable de la que se consume de la red eléctrica.
Costa del Sol: gestión avanzada y colaborativa de los acuíferos
Humedales artificiales del Delta del Ebro
En el Delta del Ebro, Agbar gestiona humedales de depuración, que depuran el agua utilizada para el cultivo del arroz mediante el uso de la vegetación acuática y los microorganismos. Estos sistemas de depuración crean espacios de gran valor ecológico: en 2020 los humedales artificiales de depuración de Illa de Mar y de l’Embut han sido declarados reserva natural de fauna salvaje por el Departamento de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat de Cataluña.
A día de hoy es una zona de alto interés ornitológico, que ofrece espacios idóneos (refugios, zona de alimentación y nidificación) para la observación de aves, algunas de ellas amenazadas, paseos naturalistas y educación ambiental.
Comunidad Valenciana: gestión avanzada de pozos
Parque de La Marjal (Alicante)
El parque de La Marjal en Alicante es una infraestructura verde urbana referente en España. El parque, capaz de recoger 45 millones de litros de aguas pluviales permitiendo mitigar las inundaciones en la ciudad durante episodios de lluvias torrenciales, cumple también una función social, como espacio municipal para uso de la ciudadanía, y ambiental, como pulmón verde para la ciudad que favorece la biodiversidad. El parque es un refugio para especies de vegetación y avifauna de la región.
Comunidad Valenciana: gestión avanzada de pozos
Depuradora de Cabezo Beaza (Cartagena)
En la depuradora de Cabezo Beaza (Cartagena), además de limpiar el agua, está contribuyendo a la conservación de la biodiversidad gracias a sus lagunas artificiales de almacenamiento de agua que sirven de refugio a más de 30 especies de aves acuáticas, entre ellas la malvasía cabeciblanca, un peculiar pato buceador que se encuentra en peligro de extinción, con una población muy escasa y localizada que en España estuvo a punto de desaparecer en la década de los años setenta del pasado siglo.